Crean baterías recargables que almacenan 6 veces más carga

Un equipo internacional de investigadores, dirigidos por la Universidad de Stanford, ha desarrollado baterías recargables que almacenan hasta 6 veces más carga que las actualmente disponibles. La nueva batería podría permitir que los teléfonos celulares se carguen solo una vez a la semana, y que los vehículos eléctricos puedan viajar seis veces más lejos, sin recargar. Se trata de un avance muy importante para hacer más operativos muchos dispositivos. Pensemos en el número de veces que nuestros teléfonos móviles necesitan cargarse, a medida que van teniendo tiempo.

Nuevas baterías recargables de alto rendimiento

El avance, detallado en un nuevo artículo publicado el 25 de agosto en la revista Nature, podría acelerar el desarrollo de baterías recargables y pone a los investigadores un paso más cerca de lograr el principal objetivo de crear una batería recargable de alto rendimiento.

Las nuevas baterías de cloro metálico alcalino, desarrolladas por el equipo que dirigen el profesor de química de la Universidad de Stanford, Hongjie Dai, y el candidato a doctorado Guanzhou Zhu, se basan en la conversión química de ida y vuelta de cloruro de sodio o cloruro de litio en cloro.

Como prueba de concepto, los investigadores crearon un prototipo de batería de monedas de metal y cloro de sodio.

Cuando los electrones viajan de un lado a otro de una batería recargable, la recarga revierte la química a su estado original para esperar otro uso. Con las baterías no recargables no ocurre así y una vez drenadas, su química no puede ser restaurada.

Una batería recargable es como una mecedora, explica Dai, se inclina en una dirección, pero luego se balancea hacia la otra cuando se agrega electricidad. Lo que se tiene aquí, afirmó, es una mecedora de alto balanceo.

Un descubrimiento fortuito

La razón por la que nadie había creado aún una batería recargable de sodio-cloro o litio-cloro de alto rendimiento, es que el cloro es demasiado reactivo y difícil de convertir de nuevo en un cloruro con alta eficiencia.

En los pocos casos en que otros pudieron lograr un cierto grado de recargabilidad, el rendimiento de la batería resultó pobre. Pero en uno de sus primeros experimentos con cloro y cloruro de sodio, los investigadores de Stanford notaron que la conversión de un producto químico a otro se había estabilizado de alguna manera, lo que resultó en cierta recargabilidad.

A los científicos les tomó alrededor de al menos un año darse cuenta realmente de lo que estaba pasando. Cuando lograron comprenderlo, la idea tomó forma y permitirá crear una nueva batería, la más eficiente hasta el momento.

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